Mauricio, Cristina y la sátira del romance del siglo XXI


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Eduardo Peralta Acevedo



Ella volvió a sorprender a todos al colocarse como copiloto de su propia fórmula. El sorprendente anuncio descolocó a todos; en el oficialismo no se pronunciaron hasta días más tarde. Es muy probable que el enojo de Don Mauricio sea algo inocultable: "Con que excusa me va a venir esta, ahora. La cosa era que estuviéramos los dos solos. Dejar afuera a todos. Miren lo que hizo esta mujer. Me desconcierta." Por el otro lado, ella con una nueva estrategia de ir de copiloto en su propio escudería: Piensa en cuando le pudo haber afectado esta decisión: "Espero que comprenda que lo hice porque tenía las manos atadas".

La única certeza que hay por estos días, es que tanto Cristina como Mauricio, se necesitan (No se si como Romeo a Julieta o Bonnie a  Clyde y Sid a Nancy) ¿nunca han oído la frase que dice del amor al odio hay un paso? bueno, acá los tenemos. Nos imaginamos la relación; resumo una escena dramatúrgica: Es la tarde, el sol esta bajando, Mauricio, recién llegado de la volcánica "Casa Rosada". Está parado mirando el río (o lo que se puede ver) desde esa loma con el celular en mano esperando a que suene. Los minutos pasan y su ansiedad va en aumento:
-Es la última vez que confió en ella.
Por otro lado, podemos verla a ella en "El Calafate" -su lugar en el mundo- Con algún tapado de esos que de entrecasa, Mientras espera que el hielo ése caiga de una vez por todas, porque ya está cansada de estar muriéndose de frío, y ese "hielo de mierda" que no se mueve. De última si sigue unos minutos más así, llamara al "Pelotudo" para que la bajen. Le desespera ver eso y que no caiga. Ella espera un llamado desde hace días. Al igual que el, están indecisos de llamar o esperar. Ella se decide hacerlo de una vez por todas, porque nunca pensó mucho las cosas, siempre fue una mujer de acción,odia la tibieza de pensar tanto:
-Puta carajo, mierda. Este pelotudo tiene ocupado el télefono. Voy volver a intentar.
Ella continua intentando ante el creciente enfado de no poder conectar.
Mientras tanto en Olivos, don Mauricio tambíen se decidió por llamarla:

-Mierda, da ocupado. Debe estar dando algún discurso por radio. (vuelve a intentarlo). No hay caso.
Ante la penumbra, comienza a sentir esa necesidad de la otra persona. Mientras desde la casa escucha:
-Mauricio ¿donde te metistes?, la nena quiere ver a Bernie con vos.
-Uy, ese oso de mierda, me tiene los huevos llenos. No veo la hora de que sea grande y se vaya. (medita un segundo)
-¿que haces acá Mauricio?
-Nada, pienso en soledad. 
-Ya veo.
-Si, "ya veo", deberías entender que no gobierno un país, si no un manicomio ¿quien me manda a meterme en esto?
-Mauricio, no te pongas así, vamos adentro.
-Bueno. Espera que hago un llamadito más y entró.


Cuando Cristina Kirchner felicitó a Mauricio Macri por el triunfo electoral en la segunda vuelta, para Jefe de Gobierno, en el 2011, Se dio cierta licencia para contar como una formal llamada telefónica, terminó contando sobre que el está hablando en calzoncillos. a lo que desató la risa de los presentes y televidentes. Unos meses más tarde, cuando le tocó a Cristina recibir el llamado de felicitación por el histórico "54%", no tuvo reparos en preguntarles si en esta ocasión estaba de nuevo en calzoncillos. A lo que, Podría decirse que algún signo de atracción quedó flotando en el aire. Más allá de la "no" entrega del bastón presidencial cuando Mauricio asumió.

 Pero durante el 2016, volvió a florecer ese "algo", cuando el la protegió de cualquier embestida, haciendo tiempo para no cargar con semejante "precio". Se podría decir que algún mensaje de humo habrá enviado a Comodoro Py, para que le tire el paquete y que el peronismo se arregle. El estaba contento, después de derrotarla en la urnas de Octubre. Aunque en el fondo, sentía cierta nostalgia por ella que se iba alejando del llano. Que una derrota ante semejante candidato como Bullrich, era imposible que pudiera volver después de perder la provincia de esa forma. Pero el "piloto automático" del gobierno, no supo o no quiso ver ese iceberg. ahora ella exultante quiere volver a trepar a su cima. Pero con el kirchnerismo, nunca hay que dar nada por ganado, porque tienen el arte de arruinar victorias imposibles de perder.








(Continuara...)




Ignacio Bustos

Twitter: @igbeabustos



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