Millennials: Viaje al corazón de la generación destinada a cambiar el mundo



¿Qué es ser parte de la generación millennial? Te compartimos una radiografía de una generación destinada a "cambiar el mundo, que busca romper los paradigmas establecidos y hacer las cosas a su modo.

beneficios de los millennials

Ignacio Bustos -  Cultura Colectiva (México)

¿Qué es ser parte de la generación millennial? Se dice que está destinada a cambiar el mundo. Es muy probable que eso suceda, sólo en lo cronológico. Se puede decir que es una generación incomprendida y hasta sobrevalorada. Los valores de ésta pasan más por cuestiones frívolas y superficiales. Muchas veces en Internet nos topamos con artículos trazados con la noble pluma bien marcada de la impronta millennial, en los que cuestionan hasta el hecho de tener hijos, como si la humanidad saliera de un huevo. Cuestionan el por qué hay que cortar la fiesta. Sin la impronta de estar bajo la influencia de los grandes autores, largan dogmas de poco sentido como slogan para alguna gaseosa light para el verano: "Vivir intensamente". Son una generación hija de las redes sociales. Se criaron bajo ese formato de interrelación social.

Hacen una liturgia del placer y el hedonismo, evitando toda complicación que la vida les pueda traer, como cargar una familia. El largo plazo que implica trabajar en alguna empresa puede ser visto como algo decadente y aburrido. Una generación que es un laberinto de contradicciones; abrazan una estética minimalista, descartando el mínimo de arreglo, por esa cuestión de no estar atados a la cosas; sin embargo, la mayoría está atada a empleos que detestan simplemente porque les posibilita financiar el confort. También son capaces de vivir muy austeramente sólo por un viaje, más allá de los años que les lleve pagarlo. Tienen cierta dependencia de la red social; muchas veces llegan al extremo de la adicción. No se desviven por hacer algo grande de sus vidas. Sus metas no están en algo más sólido que no sea el placer y la cuestión estética. Por un lado a pesar de que demuestren ciertos destellos geniales, es asombroso la carencia vanguardista que demuestran.


Es una generación que le escapa al amor porque lo consideran como un obstáculo a su mundana libertad. No se desviven tanto por el sexo, sino que lo viven como algo muy común y corriente. Muchas veces el amor les suena algo soso y obsoleto. Es muy común ver gente de más de treinta años que te diga que nunca se enamoró, pero te hablan del amor como grandes expertos. Es una generación que le brota una especie de narcisismo, algo desmedido por momentos. Las empresas no saben qué hacer con ellos porque entre lo inestables psicológicamente y lo poco responsables que pueden llegar a ser, se duda de sus capacidades. En una ocasión, el pianista y director de orquesta Daniel Barenboim afirmó: "Aprovechen que esa música en el futuro es muy probable no exista más", lo que supone que van a surgir cada vez menos artistas fuera de serie. Da la sensación de que tratan de esquivar el mínimo de sufrimiento.

Por otro lado, lo que es difícil de entender es que en los últimos 20 años se han producido cambios tan drásticos a nivel social, consecuencia de los cambios tecnológicos. Se puede observar de esta generación el empeño invertido en lo estético, porque lo ético al ser una sociedad con un sistema de valores líquidos, con el correr del tiempo va perdiendo sentido. Lo que importa es lo que se puede ver y tocar. Lo demás se podría dejar congelado en una consideración. Seria un pronóstico bastante apresurado decir que son una generación carente de aura porque las cosas maravillosas se ven con el tiempo, más allá de las lecciones útiles que pueden servir. Millennials: se muestran como la generación de la ruptura de lo común y ordinario, pero sin alterar muchos centímetros de su rutina.





Ignacio Bustos

Twitter: @igbeabustos











Comentarios