El asueto sin fin

El asueto sin fin

AGUAFUERTE PORTEÑA

Madrugada del 1° en Corrientes y Gascon, Buenos Aires / Foto: Beavis Bustos
AUTOR: Nacho “Beavis” Bustos | Corresponsal en Buenos Aires
El del 25 de diciembre fue el feriado más largo de todos tiempo, ya que enganchó el viernes 26 y el fin de semana. El lunes, la gente que necesitaba salir de tanta atmósfera de feriado, volvió con  ganas a trabajar, aunque se notaba que se habían rajado más de la mitad.
“Después son los primeros llorones, que no les alcanza”, me decía una señora, bastante entrada en años. El mercado era algo irreconocible, en Provincia siempre a las 20:30 las cajas siempre están abarrotadas- porque el “iluminado” decreto Provincial de Mancuso Scioli prohíbe la venta de alcohol después de las 21 hs- pero en estos feriados, uno pasaba como “Colectivo lleno”.
Llegó un momento de tanto feriado enganchado con el finde, que se perdía la noción del tiempo y espacio, y quedaba esa impronta de 25.
En épocas de fiestas surge siempre esa disputa en cada pareja “si con mi familia en navidad y con la tuya en año nuevo”. El recuperarse del dolor de Bolsillo, que nos deja estas fiestas, cada año se hace más largo dicho tratamiento, aunque todavía queda el golpe de K.O final para los que tienen hijos chicos con “los Reyes Magos”.
El errarle por querer ahorrar el taxi (el de fiestas se paga poco más que con la hipoteca de la casa) y quedar pagando esperando un bondi en la parada, con el sufrimiento de la espera, mientras todos ya están comiendo, apelando a cualquier cosa con tal de llegar a tiempo; al final, siempre sale caro.
El transporte público de los días feriados, es tan cómodo si uno tiene la suerte de agarrarlo bien, que hasta puede hacer asiento cama y más. Ver esa ciudad fantasma del primero a la madrugada, esa ciudad que uno entre sueños, le gustaría tener para sí aunque sea un día.
Aunque, nunca falta ese insólito maratonista madrugador de 1 de enero.  Este año había que tener más cuidado que se le decía a una mujer, ya que la importación traba por los iluminados, hizo que hubiera  gran escases de tampones, imagínense la histeria femenina hasta por twiter pidiéndolos a gritos.
No faltó el recuerdo, para nada de los goles errados en la final del Mundial y lo que podía haber sido, que ya a esta altura, parece que hubiera pasado una década. Todavía hay quienes la ven adentro- síntoma de sentirla.
Los trabajadores de la burocracia Nacional, se habrán olvidado la última vez que fueron a trabajar, porque pidiendo 4 días, muchos se hicieron dos semanas de arriba, con puentes y alargues.
Las noticias de que la presidenta se patinó con un cierto “liquido” y se facturó, trajo todo tipo de risas. No le perdonan una, pobre.
Y lo de la pobre chica asesinada en Valizas, trajo todo una nueva generación de especialistas en criminología. Es increíble la zarta de estupideces con que el periodismo especula y saca “conclusiones”, sobre todo los “America Boys”, los ambiciosos muchachitos del canal de Villa, cualquier cosa vale con tal de pelear un punto de Rating.
Otros clásicos de finde año, es el primer nabo que llega a Mar del plata (arriesgando la familia y todo, con tal de tener un par de mugrosos descuentos) y el primer nacimiento.
La primera gran nota de color del 2015; es la del “boludón” de 27 años, luego que todos los medios anunciaran que había “desaparecido argentino de 27 años en la Mansa”.   Luego apareció  por ahí, lamentable. Como diría Borges, “del ridículo, no se vuelve más”, aunque creo que en esta indiosincracia, se vuelve de todo.
En definitiva, comenzó el año más  esperado por muchos (el último de Cristina), un 2015 en que va haber muchísimo en juego. Será un año sin dudas muy largo, luego de un 2014 que seguro recordaremos mucho.
Ahora, es tiempo de descansar y recargar pilas para lo que viene.

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