Eduardo Peralta Acevedo - Aguafuerte Porteña
El otoño Porteño es una suerte de histeria constante, donde uno sale medio desabrigado por el calor del sol y al llegar a la sombra, lo agarra de sorpresa ese vientitó traidor; como al pirata lo enganchan en "off side" un Jueves en una injustificable situación. A los pocos minutos, de haberse puesto esa liviana campera, comienzan a correr por el cuello, esas icomodas "gotas" de sudor frío. No hay con que darle, el clima es como la indecisa mujer que va al shopping y tiene que comprar un vestido para un casamiento. Mejor no; acompañar o ir bastante anticipado como una temporada.
En Buenos Aires como los lugares ganados su reputacion, como esos "tipicos" personajes paracaidistas, que uno ve en cualquier lugar y situación, que son un clásico en la calle, o en los mismo lugares, como simple "atracción de la casa". Pero algo que todavía se mantiene esta "Histérica" ciudad, son esos históricos Bodegones; que no son esos tipícos lugares, que uno, por su marca, prestigio o la cierta gente que lo frecuenta, le dan un cierto lustre "para revistas de peluquera". El bodegón; tiene esa cosa , muy Porteña, esos economicos y muy grandes platos.
"Al carbon"; un bodegón, donde hoy el relator omnisciente, disfruto de un buen plato, sin que le hayan amputado la mano y uno con la cuenta. Bastante llevable. Lugar ideal, para "amigote de mediodia", comenzar a comer, charlar , pedirse otro vino, mientras, con la excusa de "no pasa nada, el hoy me cubre Gutierrez, me debe una". Si no tambien como los "amigotes" empleados del pueblo, que para llegar y para salir, no hay no hay ningun apuro. Mientras con "sus burocratas tiempos", hasta tiempo para chamuyarse a ala mosa, que con una ligera sonrisa de hacerse un poco la dificil, pero sin esforzarse mucho que digamos, ante los populares reclamos, de un burocrata, cedera. Pobre el Bodegón, perdera, una cuenta "clara" y despues antes las reiteradas "idas" al baño, de la moza de la sonrisa de "llaves prestadas".
Todo un mundo aparte, el sector del "proletariado", aunque, mas apuro en teoria tengan, sus tiempos, los amortizan a los su "infinito mundo suburbano", entibiando el vino, con los centros que anqnue nuestra chica de la sonrisa no quiera ver, siempre termina cabeceando.
No faltan, los bancarios, que con su apuro de siempre, a la mas experimentada que ya los tiene, poco mas que lista la comida en la, mesa, con la cuenta lista antes de que ingresen.
Turistas, chochos, que despues de tanto "adorno" Palermo Soho, Hollybood, Cristina, la Campora y Falta Peralta Acevedo, todos, tienen su Pelermo. Aburridos de tanto Faraonicos adornos, con menu "cajita feliz"; se encuentran con algo acorde a sus expectativas. En la silla, parecen como si hubieran traído su almohadón, a una placentera velocidad, sin apuro, atornillados, con una mera repetición de vinos y postres. Asi tambien al relaton omnisciente, le encantaria ser turista, con esos valores. Me lo imagino atrincherado, en cada tuburio de esos, como los de San Telmo, dando vueltas, evitando las insufribles Milongas para los turistas. Pero irremediablemente, con esos irreversibles" kilos e imposible de darle pelea.
La mozita, de la facil sonrisa, "intentando" de aparentar su dificultad , para ser seducida. No termina de decir Hola, en las mesa de los "jefes", que ya cuatros indisimulables y cómplices sonrisas, le ponen un cartelazo en "oferta" 2 o 3X1" pareciera, querer odecir. Mi cuenta,que hoy; seguro, no tendre que andar, contando hasta la ultima moneda, hasta los 4 pesos, de propina, son todo un acontecimiento.
"Al carbon", como otras veces; siempre abriendome las puertas, de excomulgado de las pizzerias, por no poder atrapar la "veloz e inalcanzable" y cotideana inflacion. Poco a poco, nos van empujando mas hacia, la periferia del "Centro", al menos buena onda y buenas "sonrisas", no faltan.
La puerta lentamente, se cerro hacia la Avenida de Mayo, patenado encare, mirando; si algo "sonaba" fuerte", o algun grito, podia venir de la eterna "Plaza de Mayo", un dia mas para sus olvidos "otoñales", pasaba, sin lichamientos en vivo. tema "TV", del momento a "toda hora", como la histerica pelea del presentador de "chismes", con una provinciana, con cara de hacer "su America". Es el tema del dia; antes de otra entrega de la serie "Monotonia en cadena", de la "soberana" y sus ocurrencias.
Mejor doble en Florida, y hasta La Plaza San Martin, no tenia pensado hacer alguna escala. Pero como es Buenos Aires, uno nunca sabe.
El otoño Porteño es una suerte de histeria constante, donde uno sale medio desabrigado por el calor del sol y al llegar a la sombra, lo agarra de sorpresa ese vientitó traidor; como al pirata lo enganchan en "off side" un Jueves en una injustificable situación. A los pocos minutos, de haberse puesto esa liviana campera, comienzan a correr por el cuello, esas icomodas "gotas" de sudor frío. No hay con que darle, el clima es como la indecisa mujer que va al shopping y tiene que comprar un vestido para un casamiento. Mejor no; acompañar o ir bastante anticipado como una temporada.
En Buenos Aires como los lugares ganados su reputacion, como esos "tipicos" personajes paracaidistas, que uno ve en cualquier lugar y situación, que son un clásico en la calle, o en los mismo lugares, como simple "atracción de la casa". Pero algo que todavía se mantiene esta "Histérica" ciudad, son esos históricos Bodegones; que no son esos tipícos lugares, que uno, por su marca, prestigio o la cierta gente que lo frecuenta, le dan un cierto lustre "para revistas de peluquera". El bodegón; tiene esa cosa , muy Porteña, esos economicos y muy grandes platos.
"Al carbon"; un bodegón, donde hoy el relator omnisciente, disfruto de un buen plato, sin que le hayan amputado la mano y uno con la cuenta. Bastante llevable. Lugar ideal, para "amigote de mediodia", comenzar a comer, charlar , pedirse otro vino, mientras, con la excusa de "no pasa nada, el hoy me cubre Gutierrez, me debe una". Si no tambien como los "amigotes" empleados del pueblo, que para llegar y para salir, no hay no hay ningun apuro. Mientras con "sus burocratas tiempos", hasta tiempo para chamuyarse a ala mosa, que con una ligera sonrisa de hacerse un poco la dificil, pero sin esforzarse mucho que digamos, ante los populares reclamos, de un burocrata, cedera. Pobre el Bodegón, perdera, una cuenta "clara" y despues antes las reiteradas "idas" al baño, de la moza de la sonrisa de "llaves prestadas".
Todo un mundo aparte, el sector del "proletariado", aunque, mas apuro en teoria tengan, sus tiempos, los amortizan a los su "infinito mundo suburbano", entibiando el vino, con los centros que anqnue nuestra chica de la sonrisa no quiera ver, siempre termina cabeceando.
No faltan, los bancarios, que con su apuro de siempre, a la mas experimentada que ya los tiene, poco mas que lista la comida en la, mesa, con la cuenta lista antes de que ingresen.
Turistas, chochos, que despues de tanto "adorno" Palermo Soho, Hollybood, Cristina, la Campora y Falta Peralta Acevedo, todos, tienen su Pelermo. Aburridos de tanto Faraonicos adornos, con menu "cajita feliz"; se encuentran con algo acorde a sus expectativas. En la silla, parecen como si hubieran traído su almohadón, a una placentera velocidad, sin apuro, atornillados, con una mera repetición de vinos y postres. Asi tambien al relaton omnisciente, le encantaria ser turista, con esos valores. Me lo imagino atrincherado, en cada tuburio de esos, como los de San Telmo, dando vueltas, evitando las insufribles Milongas para los turistas. Pero irremediablemente, con esos irreversibles" kilos e imposible de darle pelea.
La mozita, de la facil sonrisa, "intentando" de aparentar su dificultad , para ser seducida. No termina de decir Hola, en las mesa de los "jefes", que ya cuatros indisimulables y cómplices sonrisas, le ponen un cartelazo en "oferta" 2 o 3X1" pareciera, querer odecir. Mi cuenta,que hoy; seguro, no tendre que andar, contando hasta la ultima moneda, hasta los 4 pesos, de propina, son todo un acontecimiento.
"Al carbon", como otras veces; siempre abriendome las puertas, de excomulgado de las pizzerias, por no poder atrapar la "veloz e inalcanzable" y cotideana inflacion. Poco a poco, nos van empujando mas hacia, la periferia del "Centro", al menos buena onda y buenas "sonrisas", no faltan.
La puerta lentamente, se cerro hacia la Avenida de Mayo, patenado encare, mirando; si algo "sonaba" fuerte", o algun grito, podia venir de la eterna "Plaza de Mayo", un dia mas para sus olvidos "otoñales", pasaba, sin lichamientos en vivo. tema "TV", del momento a "toda hora", como la histerica pelea del presentador de "chismes", con una provinciana, con cara de hacer "su America". Es el tema del dia; antes de otra entrega de la serie "Monotonia en cadena", de la "soberana" y sus ocurrencias.
Mejor doble en Florida, y hasta La Plaza San Martin, no tenia pensado hacer alguna escala. Pero como es Buenos Aires, uno nunca sabe.
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