Una tragedia, mil gritos y un silencio.

Eduardo Peralta Acevedo

La tragedia mas anunciada de los ultimos tiempos, sucedio el Miercoles 22 de febrero ultimo en la estacion terminal de trenes del barrio de Once. Cuando una formacion del tren suburbano proveniente del Oeste, no pudo frenar su carrera para terminar estrellandose contra el muro de contencion, provocando unas de las peores tragedias viales de la historia Argentina, y la peor de la historia de la Ciudad de Buenos Aires, dejando un saldo de 50 muertos y 703 heridos.
Entre hierros retorcidos, gritos de deseperacion y una imagen atroz de los bomberos, la policia federal y el same, sacando victimas como sea. provocaba una indignacion aun mayor por una tragedia que se podia haber evitado.
En los ultimos años hubieron numerosos accidentes ferroviarios, provocados en muchos casos por el desinteres, la falta de mantenimiento,inoperancia, falta de control del estado con los subsidios ¿a donde iban a parar? en reiteradas ocasiones, al gobierno se le advirtio del pauperrimo estado de las lineas ferroviarias suburbanas. Oidos sordos y  multiples anuncios con bombo y platillo anunciando la remodelacion de las lineas, Como siempre en epoca electoral con la cadena nacional a cuestas, como principal testigo de un festival de humo mas del monton.
"Ella" suspendio toda actividad gubernamental, Tenia pautada de antemano una conferencia de prensa sobre Malvinas. Ya preparada para la nueva "moda"  de resaltacion nacionalista berreta, que siempre es el recurso utilizado como metodo de distraccion nacional. Debio suspender, mediante un cominicado oficial decretando el duelo nacional por dos dias, y la bandera a media hasta. sin salir hablar ni dar la cara como haria cualquier mandatario de un pais, que ocurre una tragedia de estas caracteristicas. Se fue al sur a esperar que pase el fin de semana largo.
La imperdonable actitud del impresentable Secretario de trasporte, Shiavi que advirtio que si la tragedia hubiera ocurrido un dia antes (por el feriado del carnaval), hubiera sido menor la magnitud de la tragedia. REPUDIABLE desde dodne se lo mire, e insostenible tanta torpeza e improvisacion.
Las ambulancias haciando malabares para ver como encontraban salida, porque la calle Mitre estaba cortada por el santuario alos de Cromañon. Se entiende el dolor desde todos los puntos de vista, pero ser tolerantes a tanta estupidez es mucho y se paga caro con estas negligencias. que las ambulancias perdian un tiempo valiosisimo con heridos de gravedad por un santuario en medio de una arteria tan importante.
No puede ser, que para que alla cambios o se haga lo que se tiene que hacer, tienen que ocurrir estas horribles tragedias para que suenen como simbronazos.

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